Plantas medicinales: "Judía"
- Escrito por Jorge Cruz Suárez
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- Publicado en Salud Viva
Algo de la historia de la planta:
Como alimento las judías fueron utilizadas por los primitivos habitantes de Perú según atestigua el hallazgo de semillas en tumbas incaicas; también se conoce que constituían el alimento básico, junto con el maíz, de los mayas y los aztecas de México. Hasta principios del siglo XX no se la conoció por sus virtudes medicinales.
Descripción
Herbácea, trepadora de tamaño variable, desde hasta medio metro o hasta dos a tres metros según la variedad; tallos herbáceos, verdosos, algo velludos y ásperos que se enredan sobre las estacas de cultivo; hojas divididas en tres foliolos ovales que terminan en punta; flores en ramilletes que pueden ser blancas, rosas o lilas; el fruto es una vaina alargada que acaba en punta y que contiene semillas arriñonadas en su interior.
Origen y ecología
Su origen probable es en Perú, desde aquí a España y resto de Europa.
Introducida. Cultivada. No amenazada.
Localización
En cultivos agroalimentarios más o menos extensivos y en las huertas familiares para consumo propio.
Parte utilizada
Las vainas o frutos desprovistos de las semillas.
Principios activos fundamentales
Propiedades e indicaciones terapéuticas:
Derivadas de la experiencia de uso tradicional
Las vainas de judías se han utilizado tradicionalmente como hipoglucemiante o para rebajar la glucosa en sangre de los diabéticos; como diurética en las retenciones de líquidos, en las infecciones y molestias urinarias o disurias, y en los cálculos urinarios; y como depurativas en casos de reumatismos y exceso de ácido úrico.
Según el contenido en principios activos o ensayos farmacológicos
La actividad diurética estaría justificada por la presencia de arginina y sales minerales.
La acción antidiabética puede también estar mediada por la arginina, por el ácido silícico y por el elevado contenido en cromo.
Derivadas de ensayos clínicos
Avaladas por ESCOP o Comisión E u OMS
La Comisión E del Ministerio de Salud alemán acepta como indicación probada para las vainas de judías como coadyuvante en el tratamiento de las molestias urinarias o disurias.
Efectos adversos, incompatibilidades y precauciones
Dosis y forma de administración
Se realiza una decocción: 2-3 grs. de vaina de judía seca troceada, una cucharada de las de postre de 5 ml, para una taza de 150 ml; mantener hirviendo a fuego bajo durante 5 minutos, dejar reposar otros 5 a 10 minutos, filtrar y tomar tres a cinco tazas al día.
Ejemplos de utilización
Maceración de habichuelas o vainas frescas de judías para la diabetes
Se pesan alrededor de 50 gramos de habichuelas frescas y se cortan a lo largo en tiritas, y luego se pican a lo ancho; se deja en maceración durante 12 horas en 1 litro de agua embotellada y sin gas, después la colamos y el líquido que nos queda se toma repartido en cuatro o cinco tomas al día.
Decocción antidiabética de habichuelas
Hervir a fuego bajo 10 grs. de vainas de habichuelas frescas en medio litro de agua; mantener al fuego hasta que el agua se reduzca a la mitad. Tomar el líquido resultante repartido en varias veces a lo largo del día, mejor después de haber comido.
(*) Cuando se tomen remedios de plantas medicinales para la diabetes existe riesgo serio de hipoglucemias, es preciso el control de los niveles de azúcar en sangre; y probablemente también convenga ajustar las dosis de fármacos hipoglucemiantes. La mejor recomendación es la consulta al médico.